Los maquilladores profesionales dividen a sus clientas según muchísimos parámetros, como personalidad, estilo, simetrías, técnicas como el Siang Meng... Pero para nosotras que somos novatas, creo que lo más importante a la hora de elegir un maquillaje es hacer una parada en la teoría del color.
En el lenguaje del color existen los cálidos y los fríos.
Dentro de los cálidos encontramos dorado, naranja, rojo, marrón, amarillo, caldera, teja, avellana, beige y todos sus derivados.
En los fríos tenemos verde, gris, rosa, plata, granate, azul y violeta.
El negro y el blanco son colores neutros y por lo tanto válidos para cualquier harmonía.
En cada rostro existen 3 elementos que determinan si pertenecemos a una armonía fría o cálida, que son el color de pelo, el de ojos y el tono de nuestra piel.
La armonia FRIA: cabello claro, ojos claros y tez clara. Por ejemplo Claudia Schiffer
La armonía CÁLIDA: Cabello oscuro, ojos oscuros y tez morena. Como Sofía Vergara o Eva Longoria.
Cabe destacar que en cuanto a cabello nos referimos al cabello que muestras mas que al color natural ( para elegir maquillaje).
Si de estos tres elementos hay dos que pertenecen a una armonía, no importa que el tercer elemento no corresponda. Por ejemplo una persona de pelo negro, ojos azules y piel clara, es una persona de armonía fría a pesar de que el cabello sea negro.
Definiendo adecuadamente la armonía a la que pertenecemos, sabemos interpretar cuales son las tonalidades que mas nos van a favorecer.
Cabe destacer que hay algunas personas de armonía neutra, que tienen la suerte de que todo les favorece. Son personas cuyos tres rasgos ( cabello, piel y color de ojos) no es claramente marcado. Castañas con ojos marrón claro o rubias oscuras de piel morena y ojos miel, por ejemplo.
Para llevar a cabo un buen maquillaje es básico tener la piel limpia e hidratada. Para un maquillaje diario podemos seguir nuestro ritual habitual ( recuerdo: limpiador, tónico, sérum, contorno de ojos e hidratante con spf) y después maquillar.
Para un maquillaje de fiesta, hay que prescindir de todo esto ( el exceso de hidratación hará que el maquillaje dure menos o se borre facilmente) y optar por un producto base de maquillaje ( la mayoría de las grandes firmas tienen el suyo) o si no una limpieza simple.
Un paso previo que siempre hay que tener en cuenta es la ceja. La línea de las cejas representa un elemento capital en la armonía y el equilibrio estético del rostro. No hay que descuidarlas ni depilarlas en exceso. La funcionalidad de la ceja es enmarcar el rostro. La ceja debe empezar a la altura de la aleta de la nariz ( lo que hay entre los ojos hay que quitarlo) y acabar en el rabillo del ojo. Para medirlo no vale un lápiz, hay que hacerlo con un palito de naranja, de los que se usan para la manicura.
La luz ideal es la que usan los buenos maquilladores, espejos con bombillas ( a lo Hollywood) de luz natural ( si, existen bombillas efecto luz natural). Si no tenemos esa opción a mano, maquillarse y luego sacar un espejo de mano a la luz del día para asegurarse de no parecer una puerta.
En cuanto a los pasos a seguir, lo primero es escoger bien el fondo de maquillaje. Primer error: probarlo en la mano. El maquillaje hay que ir a comprarlo con la cara lavada y probarlo en el rostro, porque hay que escogerlo de nuestro color. Más oscuro nos envejece y más claro nos resaltará las imperfecciones. En cuanto a la marca cualquiera de las grandes marcas nos sirve, da igual Chanel, que Dior, que Bobbi Brown. Hay que escoger la que nos guste más.
El fondo de maquillaje se debe aplicar a golpecitos, presionando muy suavemente con una esponjita. O sea movimientos cursis y delicados.
2. Ahora pasamos al corrector de ojos. Tienes que escoger un tono claro y aplicarlo en forma de media luna en el párpado superior e inferior y solo en la mitad interna del ojo. Es decir mentalmente divide el ojo en dos partes y desde el centro hacia adentro aplica arriba y abajo el corrector con el dedo limpio. Una vez aplicado arrastar al resto del ojo y difuminar.
3. Polvos translúcidos ( para las más perezosas existen las bases de maquillaje con efecto polvo para hacer dos pasos en uno). Se vuelca un puñadito de polvos en la base de la mano y se aplican usando una borlita a golpecitos cursis otra vez evitando el contorno de los ojos.
4. Pasamos una brocha gorda limpia para eliminar los excesos.
5. Peinar y despeinar ceja con un cepillito de cejas para eliminar también los excesos de maquillaje.
6. Usar un lápiz corrector de color blanco roto para dar un punto de luz debajo de la ceja en el extremo exterior y difuminar. Aportarás luz a tu mirada. No usar un blanco puro, siempre un blanco roto.
7. Elegir el color de la sombra basandonos en la armonía. Una vez elegida aplicar con brocha en el párpado movil y difuminar. Si vas a jugar con varias sombras recuerda el color medio en el párpado móvil, claro en el superior y la mas oscura en la V exterior del ojo.
8. Si vas a optar por raya o eyeliner este es el momento de aplicarlo. El eyeliner se coloca mejor poniendo el aplicador lo más plano posible.
9.Aplicar Rímmel. La forma correcta es hacerlo de la base de la pestaña hacia arriba y en zig zag.
10. Aplicar gomina de cejas ( también conocida como Rímmel transparente). Peinar las cejas hacia arriba en plan diablo y colocarlas de nuevo en su sitio con un pincelito fino.
11. Perfilar los labios, sin salirse de la raya del contorno, con el color elegido y arrastrar posteriormente el color hacia el centro del labio con un pincelito.
12. Lápiz corrector de labios y finalizar con el lapiz de color elegido.
13. Colorete. La forma correcta de aplicarlo es sonriendo exageradamente y marcando la parte del pómulo que sobresale.
Como consejos extra: hay que invertir en la base y los polvos. Los coloretes, barras de labios y sombras pueden ser de marcas mas sencillas sin problema.
Como este post es muy largo, reservo para el próximo día la parte de las correcciones y algunos detalles más.
Feliz maquillaje!
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